Método de los Vínculos (VIII)

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Publicado: 01/05/2011 - 13:05:58
Autor: Gus Coyote [Temas: 11]

Barrido de los números 2, 3 y 5

Nos quedan por barrer los números 2, 3 y 5. Barriendo el 2 salen a la luz un 2 definitivo en la región 3 y dos nuevos vínculos, situados en las regiones 9 y 5 (Fig. 10).

Al hacer los barridos del 3 encontramos un vínculo en la región 5 y barriendo por último el número 5, marcamos un nuevo vínculo en la región 9 (Fig. 10).

 

 

Más barridos y más recuentos

Observando la Fig. 10 vamos a buscar grupos que contengan pocas celdas vacías, por ser los más fáciles de completar. Con una celda vacía no encontramos nada. Con dos, está la fila 5, que ya tiene su par desnudo y por el momento poco más se puede hacer. Sí que podemos en cambio recontar grupos que contengan tres celdas vacías.

En la región 6 hay tres celdas vacías, que deben estar ocupadas por los números 1, 5 y 8. Como el 1 de la región 3 barre una de esas celdas, podemos vincularlo en las otras dos. Este nuevo vínculo permite barrer la región 9 para encontrar un nuevo 1 definitivo, cuya casilla sombreada se muestra en la Fig. 11.

Ahora podemos barrer más veces el número 1 para encontrar más vínculos todavía. El vínculo de la región 8 se obtiene al barrer los 1 definitivos de las regiones 7 y 9. El vínculo de la región 2 se obtiene al barrer los 1 definitivos de las regiones 1 y 3. Se establece entonces un x-wing (Fig. 11).

Por último, barriendo la sexta columna y teniendo en cuenta que el par desnudo de los números 4 y 7 es “intocable”, conseguimos un nuevo vínculo del número 1 (Fig. 11).

Vamos a hacer nuevos barridos con el número 8. En la región 9 logramos un nuevo vínculo que coincide con otro del número 9. Lo mismo ocurre en la región 2. Ambos casos se convierten en pares desnudos, pero en el segundo, además había previamente otro vínculo del número 1 en la casilla inferior. En dicha casilla ya no podrá estar el 1 definitivo, con lo que lo podemos ubicarlo en las otras casillas vinculadas y resolver el x-wing. El resultado de todo ello se aprecia en la Fig. 12.